10 artistas clasicos y por donde empezar a escucharlos
- Ernesto Rodriguez
- 19 jul 2020
- 6 Min. de lectura
Actualizado: 28 jul 2020
Hay pocas cosas más complicadas que empezar a escuchar un nuevo artista, excepto quizás escuchar a un artista viejo. Vamos, que todos tenemos esa banda o cantante icónico que para nosotros es un punto ciego. Puede ser un grupo del que solo conocemos algún sencillo por ósmosis cultural, o inclusive un nombre legendario cuya imagen vemos en camisetas pero no sabemos de dónde viene.
Por eso, y a forma de presentarnos recogemos aquí 10 discos de artistas claves que, quizás no sean sus mejores trabajos, pero que son los mejores sitios para que un novato empiece a escuchar.
David Bowie - Let’s Dance (1983)
Bowie es una de las figuras más eclécticas y complicadas de la historia del rock. Pero para muchos su existencia se resume al icónico sencillo “Heroes” del disco del mismo título. Sin embargo, su propia capacidad para transformarse hace complicado describir su sonido como un todo.
De allí que quizás el sitio más fácil para empezar sea su gran excursión pop. Las colaboraciones con Giorgio Moroder, productor de Donna Summer y otros iconos de la música disco, y Nile Rodgers, guitarrista de Chic y del último disco de Daft Punk, ayudan a que Bowie construya algunos de sus temas más pegajosos. “Let’s Dance” es el caso más obvio pero “Modern Love” es quizás el mejor puente entre el duque blanco y el mundo del pop. Mención aparte para la versión de “China Girl” de Iggy Pop, quizás el momento más sensual del cantautor.
Siguientes pasos: The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars (1972), The Next Day (2013).
The Rolling Stones - Sticky Fingers (1971)
Cuando los Stones entraron al estudio para grabar Sticky Fingers estaban en una encrucijada. Saliendo de una extraña etapa psicodélica, de la que salieron algunos sencillos grandiosos y unos discos complicados, y de la tragedia de Altamont visto desde afuera podía parecer que el final de los 60 se llevaría por delante a la banda como lo hizo con los Beatles.
Por suerte el grupo entró a su estudio en Alabama y salió con 10 temas de rock sucios pero fáciles de digerir. La controversial “Brown Sugar” podrá ser problemática pero es difícil discutir con el riff de guitarra, “Bitch” deja que Jagger escupa toda su ira contenida y “Can’t You Hear Me Knocking” es una pieza larga y compleja que, sin embargo, es fácil de digerir. ‘Sticky Fingers’ son los Stones presionando el botón de reinicio y por tanto es un buen sitio para montarse en el tren de la banda.
Siguientes Pasos: Exiles On Main Street (1973), Beggars Banquet (1968).
The Beatles - Revolver (1966)
Revolver ocupa un lugar extraño en el panteón Beatle. El disco es un puente entre la etapa experimental de la banda y su versión más pop, por suerte en vez de resultar en un sonido incompleto el grupo termina construyendo un disco de pop básicamente perfecto.
Desde el inicio con la rockera “Taxman” de George Harrison, hasta el final con la psicodelia de “Tomorrow Never Knows” el disco muestra casi todo el arsenal musical del grupo. Hay una idea reciente de que los Beatles son un grupo aburrido, pero la variedad de sonidos de este disco es quizás la mejor prueba de que no es así con canciones tan variadas como la dulce “And Your Bird Can Sing” y la cansada melancolía de “I’m Only Sleeping”
Siguientes Pasos: Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band (1967) , Help (1965)
Pink Floyd - Dark Side Of The Moon (1973)
Pink Floyd es probablemente el grupo más conocido de todo el espectro del rock progresivo. De hecho la portada de este disco es posiblemente una de las más reproducidas y parodiadas de la historia del género, sin embargo ,sus composiciones de 15 minutos pueden ser difíciles de escuchar.
Por suerte, a pesar de ser un disco conceptual y de que la banda enfrenta temas complejos como la locura o el significado de vivir musicalmente, Dark Side es bastante accesible. Las canciones suelen tener coros o ritmos fáciles de recordar, y sus momentos más complejos (como la casi instrumental “Great Gig In The Sky”) se abren a sonidos de blues y gospel que se pueden entender. ‘Dark Side Of The Moon’ es una buena entrada no solo a Pink Floyd, sino a todo el género de rock progresivo.
Siguientes pasos: Wish You WerHeree (1975), The Wall (1979)
The Cure - Wish (1992)
Aunque la figura de Robert Smith haya inspirado el look de un millón de bandas, escuchar The Cure puede ser difícil por sus constantes cambios estilísticos. Por suerte su disco de 1992, ‘Wish’, los consigue interesados en los himnos de masas y hay que decir que saben hacerlo bastante bien.
La dulce y contagiosa “Friday I’m In Love” es el plato fuerte, pero los otros sencillos como “A Letter To Elise” y “High” son igual de atractivos. Un trabajo en que la banda demuestra que los góticos también se enamoran, y también saben bailar.
Siguientes Pasos: Disintegration (1989), Kiss Me, Kiss Me, Kiss Me (1987)
Jack White - Elephant (The White Stripes) (2003)
Jack White es uno de los compositores más reconocidos del rock moderno. De hecho, entre sus tres bandas y su trabajo solista puede ser difícil seguirle la pista, sin embargo, el disco que lo llevó al estrellato sigue siendo uno de sus mejores trabajos y un resumen de su sonido.
‘Elephant’, el cuarto disco de los White Stripes, es el puente entre el blues rock y el rock de garage que White nació para componer. No sólo contiene el sencillo “Seven Nation Army” sino que piezas como “Ball n’ Biscuit” y “Little Acorn” son perfectas para entender casi todo el rock americano de esa época, y eso sin entrar al otro gran promocional del disco, la adictiva “The Hardest Button To Button”.
Un disco perfecto para entender a uno de nuestros mejores compositores, y toda una década de rock.
Siguientes Pasos: Broken Boy Soldiers (The Raconteurs - 2005); Blunderbuss (2012)
Jorge Drexler - Bailar en la Cueva (2014)
El décimo disco de estudio de Drexler es quizás su reinvención más evidente. El cantautor uruguayo decide trabajar un sonido mucho más bailable, con una producción bastante pop, cortesía de Eduardo Cabra, visitante de Calle 13, aunque sin sacrificar la poesía que siempre ha caracterizado al uruguayo.
Las 11 canciones que sale como resultados podrían causar una impresión en los fanáticos de Jorge que les hayan dado una vuelta, pero son perfectas para los novatos. Con un mayor cuidado de los coros y de la accesibilidad el cantautor se pasea por todo el continente y nos invita a celebrar con el.
Siguientes Pasos: Eco (2004); Salvavidas de Hielo (2017).
Talking Heads - 77 (1977)
La banda de David Byrne y compañía es quizás la menos conocida de la lista, pero al mismo tiempo es una de las más necesarias. Los Talking Heads son probablemente los abuelos del indie moderno, mezclando los sonidos del punk y el new wave mucho antes de que The Smiths fueran una fantasía en el ojo de Morrissey.
Justamente es ‘77’, su primer disco, donde está mezcla de sonidos es más evidente. La saltarina “Psycho Killer” es quizás el tema más alegre sobre un asesino en serie jamás escrito. Por otro lado la ironía de "Don't Worry About the Government” y el inescapable coro de “Uh, Oh, Loves Comes To Town” se quedarán en tus playlist por un rato.
Siguientes Pasos: Remain In Light (1980); Speaking In Tongues (1983)
Bruce Springsteen - Born To Run (1975)
Springsteen es toda una institución en el cancionero norteamericano y por tanto puede intimidar un poco. Sin embargo acercarse a su música es bastante fácil, en especial a los épicos temas de ‘Born To Run’. El disco que lo llevó a la fama es también bastante accesible.
El tema que le da título al disco es un tema épico diseñado para grandes estadios, “Thunder Road” está diseñada para manejar con los vidrios a toda velocidad y “She’s The One” es una de las canciones más romanticas del rock. Es probable que después de dos vueltas estés cantando estos temas a todo volumen.
Siguientes Pasos: The River (1980); The Rising (2002)
Bob Dylan - Blood On The Tracks (1975)
La voz carrasposa de Dylan y su mezcla de poesía con activismo social hace que algunos de sus discos de los 60 sean complicados de acceder sin un libro de historia. Por suerte para nosotros en los 70 el nobel de literatura compartió una de sus obras maestras, el desgarrador ‘Blood On The Tracks’.
Inspirado en su divorcio, el norteamericano deja 10 canciones absolutamente desgarradoras, pero también fáciles de entender para cualquiera al que le hayan roto el corazón. “Tangled Up In Blue” es la más recordada, pero “You Are Gonna Make Me Lonesome When You Go” y “Shelter From The Storm” son clásicos a su manera. Dylan deja claro que no es solo música de protesta, y que la tristeza es una fuente permanente de arte. Es también uno de los trabajos donde su voz suena de forma más clara, haciendo que sea más fácil entenderlo aquí que en casi cualquier otro de sus discos.
Siguientes Pasos: Highway 61 Revisited (1965); The Times They Are A-Changin (1964).
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